La Hacienda Foral de Bizkaia ofrece una interesante deducción fiscal durante dos años a los voluntarios que den el paso
Esa es la pregunta que está rondando a los autónomos y a las pymes vascas desde que hace dos meses las Diputaciones Forales decidieran retrasar hasta el 1 de enero de 2024 la inevitable entrada en vigor del nuevo sistema de gestión de la facturación TicketBai que interactúa entre las tres haciendas forales y que en Bizkaia recibe el nombre de Batuz. Pero vayamos por partes.
¿Qué es TicketBai?
Estamos ante un sistema generado por las tres Diputaciones Forales vascas por el que, y cito textualmente “todas las personas físicas y jurídicas que realicen una actividad económica deberán utilizar un software de facturación que cumpla los requisitos técnicos que se publiquen”. Un sistema que abre la puerta a las Haciendas a, y vuelvo a citar textualmente, “controlar los ingresos de las actividades económicas de las personas contribuyentes y, en particular, de aquellas actividades enmarcadas en sectores que realizan entregas de bienes o prestaciones de servicios a las y los consumidores finales, cobrados en gran medida en efectivo. Asimismo, dicha información se utilizará para facilitar a los contribuyentes el cumplimiento de sus obligaciones tributarias”.
Esta política de control es algo que hace tiempo que asumimos como cotidiano dentro de la gestión del IRPF, donde Hacienda centraliza TODOS los datos de los trabajadores por cuenta ajena hasta el punto de poder enviar la liquidación hecha a domicilio.
¿Cómo funciona?
Este sistema recomendado por la OCDE para luchar contra el fraude fiscal y que ya funciona en Portugal, Polonia, Suecia y Austria, se basa en la utilización de sistemas de facturación homologados con licencia TBAI, y que se consigue a través de la página de registro de Hacienda. Con este sistema quedan excluidos para el uso contable blocs de facturas, documentos creados a mano, facturas creadas con Word, Excel, y cualquier otra cosa no autorizada.
Este sistema de facturación genera con cada operación un archivo con los datos de la factura y la “huella TBAI”, que contiene los datos de encabezamiento de la factura anterior, el desarrollador del programa e incluso el número de serie del dispositivo utilizado, y todo ello se remite a Hacienda que así tendrá constancia de todas las operaciones de venta y facturación de servicios que se realicen en la Comunidad Autónoma, desde la compra de par de zapatos en una tienda hasta una instalación eléctrica en una obra, pasado por una comida en un restaurante o una ronda de vinos con los amigos.
De esta manera, el ticket de la compra, la factura del servicio o la nota de la comida pasarán a emitirse desde una TPV o un registro conectado con los servidores de Hacienda que emitirán una factura inmanipulable cuya versión tanto impresa como si se envía al cliente en formato PDF, deberá tener impreso el código identificativo TBAI y el código QR. Estos códigos permitirán al cliente comprobar online si la factura es legal, válida y está registrada en Hacienda.
¿Complica la gestión diaria de las empresas?
No, en absoluto. La única alteración que se ha sufrido es la incorporación del software de facturación. Las empresas informáticas han tenido que adaptar sus programas de gestión de la contabilidad a esta nueva situación, para el usuario, autónomo o empresario, salvo los ajustes propios de cualquier inicio en el uso de una tecnología diferente, no cambia nada o muy poco.
Los autónomos que hasta ahora presentaban el registro de operaciones (140) una vez al año, a partir de ahora lo harán cada tres meses coincidiendo con la liquidación de IVA.
Para las sociedades aparece un nuevo modelo de registro de operaciones económicas (240) que se presentará diaria, mensual o trimestralmente dependiendo de las operaciones de la empresa.
Todo ello se llevará desde la “nube” en la que Hacienda tendrá registrados todas las operaciones. Debido a ello, a partir de ahora y de la misma manera que ocurre con la liquidación del IRPF, desde la administración foral se enviará una propuesta de liquidación de IVA y de Sociedades que convendrá revisar antes de aprobarla.
¿Ya es obligatorio?
La implantación del sistema ha vivido ya varios retrasos y la pandemia no ha facilitado la adaptación de todos los implicados para que el sistema entre en funcionamiento el 1 de enero de 2022. Por este motivo las Diputaciones han decido retrasar nuevamente su aplicación hasta el 1 de enero de 2024. Sin embargo aquellas empresas que ya estén en disponibilidad de incorporarse a TicketBai y decidan hacerlo tendrán un premio.
Rebaja de impuestos al que entre en TicketBai el 1 de enero
Efectivamente, la Hacienda Foral de Bizkaia ha anunciado un premio de rebaja de impuestos a aquellas empresas que entren en el sistema Batuz el 1 de enero de 2022 y abre un periodo de dos años para que voluntariamente autónomos y empresarios se vayan incorporando paulatinamente. Este periodo de voluntariado estará igualmente premiado, o bonificado, aunque dichas bonificaciones se irán reduciendo a medida que se acerque el plazo de la entrada en vigor obligatoria.
¿En qué consiste la rebaja de impuestos?
En los años 2021, 2022 y 2023 podremos subvencionar un 30% del gasto de implementación, que nos lo deduciremos del IRPF o del Impuesto sobre Sociedades según el caso.
Tendremos un periodo incentivado desde el 1 de enero de 2022 hasta el 31 de diciembre de 2023, donde podremos deducirnos hasta 15% de la base imponible en IRPF o Impuesto de Sociedades. Depende de cuando nos incorporemos.
Para verlo más claro pongamos dos ejemplos del ahorro que supondría aplicando SOLO las deducciones derivadas de la implantación de Ticketbai el 1 de enero:
Un trabajador autónomo que ha invertido 800€ en adaptarse a TicketBai y tiene con unos beneficios netos de 20.000 €
Deducción del 15% del rendimiento neto en el IRPF en 2022: 400€
Deducción del 30% del gasto en adaptación aplicable en el IRPF de 2022: 240€
Deducción del 15% del rendimiento neto en el IRPF de 2023: 400€
Total de ahorro de impuestos en dos años: 1.040 €
Una Sociedad con un beneficio de 25.000€ que ha tenido un coste de 1.500 € en adaptar su estructura a las exigencias del sistema.
Deducción del 15% de la cuota en la declaración de Sociedades en 2022: 900 €
Deducción del 30% del gasto en adaptación aplicable solo en 2022: 450 €
Deducción del 15% de la cuota en la declaración de Sociedades en 2023 : 900 €
Total de ahorro de impuestos en dos años: 2.250€
Como vemos son cifras que merecen ser tenidas en cuenta para iniciar un proceso que será inevitable el 1 de enero de 2024 y con un plazo necesario para acostumbrarse a otra manera de hacer las cosas.
¿Estás interesado en la bonificación?